Quiero mirar la vida como lo hace una flor...
Marinel.

viernes, 30 de enero de 2015

Sensaciones al amanecer.

Es un día corriente. La mirada se regocija viendo que la luz se despereza a pesar del frío matutino, se levanta hermosa eludiendo el erizo de su piel. Yo la miro venir a mi rostro engomado al cristal.
Nos saludamos como viejas conocidas que mañanean juntas anticipándose a los ruidos. Tras el mudo intercambio, echo a volar mis latitudes, me expando en partículas diminutas diseminándome por mi sosiego. Me gusta el amanecer de mi propia orilla, la del mar de mis sentidos que se abren como antenas dispuestas a percibir la música del devenir diario. Las hojas del árbol que vive cerca de la ventana, chisporrotean con el cosquilleo que la brisa no deja de hacer en su verde fronda. Cuanta quietud en las horas previas al albor de todo.
Es como nadar en un estanque en donde, momentos antes y de incógnito, nadaron las estrellas jugando con la luna. Ahí, en ese espacio indefinido hecho de etérea espuma, reina el silencio. Estas horas en apariencia muertas para otros, para mí están más vivas que ninguna otra. En ellas soy pez y nado y nado insaciable, hasta que algún sonido me advierte ...
El vórtice real llegó con sus zarpadas a despegar la paz de mi aliento.






miércoles, 28 de enero de 2015

Bizqueando...



Se tatuó el tiempo en su pupila.
Sólo en una.
La otra iba de un lado a otro perdiendo el tiempo.

lunes, 26 de enero de 2015

Amor, ¿qué...?


Amor,
 ¿qué hará tu mirada inquisitiva ante el bloqueo de mis ideas?
Cuando...
Ateridas y  escarchadas, perlen mi frente sin
 que la calima sea causante de esa lluvia.
Los dedos trémulos, se paseen dubitativos en
la fisonomía de unas letras que no ven.
¿Nada?
O...
Centrarás tus pupilas en el tiempo.
Lastrarán los segundos transformándose en horas
hasta hacer que tus párpados, en un batir de alas,
 caigan rendidos y en el ensueño te aferrarás
a los latidos que apresen la helor de
 mis versos huidos dándoles calor.
¿Amor, soñarás en mí?


jueves, 22 de enero de 2015

Cuento húmedo.

¿Dónde va la zozobra del mar
si se pierde una ola?
¿Levará una plegaría quizás
persiguiendo la forma de volver
a sentir su vaivén sin igual?
Sólo una...y la pena lo ahoga.
El latido fluvial se devana
en mil formas, se hace ímpetu,
se desborda.
Esa ola que perdió voluntad de seguir
en perpetua humedad, se hizo eco en la sombra
usurpó de una flor suavidad hasta hacerse
mujer y no adolece su piel el no ser
una ola de ese mar que la busca
 y la llora.


martes, 20 de enero de 2015

El óbito del día...

Al dormir, entre aromas de sueños, el rumor del invierno
besa la ventana. Su siseo acodado tras los cristales
toma el halo de mi aliento y lo lleva lejos
en vaharadas de luz cual pétalos de una rosa
yacida tras el brío de su efímera vida.


sábado, 17 de enero de 2015

Baivolando...

Movió el aire el suspiro de su piel.
Los brazos emergieron en abrazo,
los labios en susurro desvestidos
 de pudor danzaron en el éter con pasión.
Los pies se hicieron duendes del céfiro jardín.
Entre los dos, surgió el hechizo...
Bailaron ese son inesperado, volátil, aireado.



                           Porque... bailar es volar y ese vuelo es un acto de amor...en azul.

miércoles, 14 de enero de 2015

Cuando llueve el alma...

...Se nos cierne una noche lóbrega.
Orbita la inconsciencia hasta que entiendes
que tras esa densa oscuridad...

Siempre están las estrellas.
Ilustración de Jimmy Liao

domingo, 11 de enero de 2015

Lejanías...

Me fascina lo lejos. Los horizontes coquetean con mis neuronas hasta seducirlas 
consiguiendo que me pierda en ellos. Bajo los párpados, en mis atrincheradas pupilas,
surgen chispas de pura efervescencia. Bajo la nariz, una sonrisa bobalicona se dibuja en mis labios.
Ah..., la nariz.
De inmediato, en ella penetran efluvios de viaje; aletea, se ensancha, baila levemente como crepitando tratando de ir entre volutas de aire hasta el remoto punto donde la mirada se instaló solo un tiempo antes.  Es inalcanzable, le dice mi mente.
Me entusiasma imaginarme en ese límite distante descubriendo alrededores nuevos, gentes insólitas con aromas extravagantes arrasando las fosas nasales.
Me gusta tanto la lontananza que tras de mi frente he hecho un taller de bosquejos confines en los que la imaginación fabrica historias para mis chispas, sonrisas bobas y olores abisales.



jueves, 8 de enero de 2015

Destellos.


Hoy encendí una cerilla. Pensé en ti. En mí. En todo.
¿Qué hacer para evitar pensar?
La cerilla la tomé por gusto. La encendí como para cerciorarme de que el pasado existió.
Una rascadita leve y ¡zas!
Ahí estoy de nuevo, en el lugar y momento exacto que al poco de ser presente ya nacía pasado, ya descendía en fulgor e intensidad hacia la irrefutable extinción.
Las cajas de fósforos son de varios tamaños, pero todas albergan esos palitos llameantes...

miércoles, 7 de enero de 2015

De sonoros rescates...

*Obra del pintor Alex Alemany



Si me desoriento. Si la paz se me vuela y en su aleteo queda velada, enmudecida y sorda.
Busco siempre en la música su rescate y así..ponerla a salvo junto a mi éxtasis.




                                                             

lunes, 5 de enero de 2015

Por pedir...

¿Qué pedir a esos reyes que viajan cargados de deseos por cumplir?
¿Para todos?
¿Para mí?
Quizá...
Horizontes alcanzables. Caminos marcados. Sabiduría despierta. Sueños tangibles...Al fin.
Y, ¿por qué no?
Versos acunándose entre almohadas de sentires. Palabras que no se queden sin voz. Letras jamás rezagadas en las puntas de los dedos. Besos como sellos. Te quieros inagotables. Risas sonrientes.
Resumiendo...


Que la vida no se nos seque sin haberle cortado las espinas...

domingo, 4 de enero de 2015

Donde el aire me lleve...

El tiempo se disipa, nace etéreo como ráfaga de viento.
En cada cual, otros aires bambolean, se hacen
 giros suaves, danzan cual pequeños colibríes. 
Cual tifones  o alisios vadeando el ecuador de
 mi esternón, en mí, y a su libre albedrío, 
viaja el aire en forma de respiro.
Trataré de controlar el hálito que proyectan mis labios.
Nada menos, nada más.
(Inspirar. Espirar)
Al alojo del momento, cuando lo considere 
sustancial el corazón y así lo dictamine:
Ventilaré olvidándome de las agujas del reloj.
Suspiraré e incluso habrá tiempo para géiseres
horadando mi intestino en busca de salir
por las ventanas de mis ojos.
Tal vez, en un enojo airado por demás, orear,
sea como lanzar improperios furiosos.
Espero, me sabrás perdonar...
Yo soy así... de viento dulce o vendaval.


Unas palabras profundas...

Ahí afuera, mas allá de ideas de bien o mal,

hay un lugar.

Nos vemos ahí.

Cuando el alma yace sobre la yerba.

El mundo esta demasiado lleno para hablar de él.

Las ideas, el lenguaje, incluso la frase 'cada uno'

No tienen sentido.



"Yalal ad-Din Muhammad Rumi"
















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