1/La herrumbre de mis huesos no traiciona, 
es suave delatora de sucesos que ocurrieron. 
No es ave traicionera que de a poco
 te lleve hasta su nido y te devore.
 Es fiel cotilleadora.
2/Ha entrado en el jardín de mi aposento,
 quizá no se fue nunca y yo lo sepa, 
mas es ahora cuando está cuerpo presente,
cual  moribundo exhalando sus últimos suspiros,
sin falta de alimento.
sin falta de alimento.
3/Me avisa sin remiendos ni costuras
del tropel que se avecina.
Heme aquí mirándola vencida, 
sabiéndome presta al desatino de viajar un viaje conocido
a la vez que sin respuestas.
sabiéndome presta al desatino de viajar un viaje conocido
a la vez que sin respuestas.
4/No tuvo a bien el paso de los años,
 echar tan sólo flores a mi paso.
 También hallé arbustos espinosos
 rasgándome la piel con alborozo.
5/Son ellos insensibles, no así el vestido que me guarda,
o aquel otro invisible que arropa mi interior.
Se hizo vigía de mi barco en duermevelas amorosas, 
portera de vanos sentimientos, también de los candentes crepitando
entre mis manos u odiosos pensamientos confrontados,
alimento al fin de orgullo innecesario.
portera de vanos sentimientos, también de los candentes crepitando
entre mis manos u odiosos pensamientos confrontados,
alimento al fin de orgullo innecesario.
6/Jamás renegaron ser columnas del andrajo de mi cuerpo,
 ni antes cuando la juventud semejaba eternidad, 
ni luego en decrépito festejo o ahora en marcha fúnebre
 hacia el cortejo con la muerte.
7/Me iré con ellos puestos sabiéndolos perdidos a dormir
el más allá que se desliza sigiloso entre mis dedos.
Jugamos la partida del partir sin aspavientos, ellos y yo.
Yo y mis secretos.
Viví desde el nacer para morir. Hoy sé que muero. 
8/Vacía no, a eso vendrán luego los sin hueso. 
Ahora marcharé con mis recuerdos.
 Algunos rodeados de vívidas personas que se quedan,
 otras ya partieron a esperar les diese alcance.
 Ya deben sonreír desde sus púlpitos u hogares tan etéreos.
9/Amé, me amaron y si nada me lo impide, amando moriré.
No a todos tuve y sin embargo amé también algunos que no fueron
presente en mi vivir; a alguien en concreto.
Pero ese es mi secreto.
10/Llegado está el momento,
de ver la sangre despedirse.
 Mis huesos me dictan con crujidos
 el camino que seguir, no el de regreso 
 


