Me da los buenos días.
Me despierto.
Me siento frívola a su alcance.
Ni un poco me rebelo.
Lo deseo.
El agua se desgrana sobre mí.
Se enredan los ayeres en mi pelo.
Se ríe el espejo de la vida
de esa maraña de recuerdos
frente a él.
Sonrío yo a mi vez.
Lo miro de reojo y sigue allí
tan oloroso.
Me es tan necesario su alimento...
Me desperezo.
Aliso pensamientos y el encanto se diluye
entre aleteos de pestañas ya lavadas.
Los labios con carmín.
Rubor en mis mejillas y el perfume
Corriendo desbocado por mi cuello.
Ahora es el reflejo de mi misma quien sonríe.
Soy yo.
Marinel... estas últimas entradas, tan mujeres, tan femeninas.. tan personas.. me tienen encanta..
ResponderEliminarEste último post.. ¿frivolidad? aissss. que gusto.. casi te huelo..
leerte es casi como si proyectaras preciosos reflejos..
un beso niña..
No hay nada como el contento interior que mana de ese amor por una misma.
ResponderEliminarUn placer leerte
Lo de calzarte los "tacones" ha sido un epilogo extraordinario. Te imagino. ¿Sabías que tengo debilidad por los tacones de aguja?
ResponderEliminarUn abrazo
Un despertar risueño !!!!como dominas el arte de toda mujer que sabe manejar su vida...y valorar los pequeños detalles...leyendote consigo sentir una inmensa alegria de ser mujer!!!!! Un abrazo de Begoña
ResponderEliminarClaro, por eso me vuelvo cuando pasa una mujer, ese perfume y ese halo que la rodea... y esos tacones pisando fuerte.
ResponderEliminarMa gustao,
Un beso,
A mí me gustan unas gotas de colonia -M. Dutti-, pocas. Al salir sin ellas parece que me falta algo.
ResponderEliminarEl perfume es un halo de personalidad.
Un abrazo Marinel
De frivolidad, nada.
ResponderEliminarTu texto es tan real, tan auténtico, tan tú... que el perfume llega hasta los comentarios y los impregna.
Magnífica entrada, Marinel.
Cariños varios, amiga.
Uno mismo es lo mas importante..para poder ser..y vivir a pleno.lo que la vida nos da..
ResponderEliminarLa frivolidad si se usa para bien..es un artificio mas..
Un besote
Muy buen final M.
ResponderEliminarSoy yo.
Me calzo los tacones y me alejo.
Abrazo grande
quien te oliera
ResponderEliminarMe gusta la frivolidad
ResponderEliminarLindo romance con el líquido.
ResponderEliminarMarinel hija mia si te olí y todoooooooooooooooooo!!!!!!!!!!!geniallllllllllll besitossss corazónnnn
ResponderEliminar¡Lindo poema! Todo un ritual femenino, maravillosamente descrito por tu pluma exquisita.
ResponderEliminarRecibe un fuerte abrazo y mi admiración de siempre.
Qué despertar más apasionado, mujer.
ResponderEliminarABrazo inmenso
SIL
Que bonito despertar! así da gusto empezar el día.
ResponderEliminarbssoss
Preciosa creacion, amiga... Me encanta como juegas con las palabras
ResponderEliminarUn abrazo y feliz fin de semana
Igual que las ondas de agua se ciñen para embellecer el balanceo de una barca, así el perfume a una mujer. Beso para los sentidos. Te he dejado comentarios en los poemas a la mujer. Me encanta leerte. Un beso
ResponderEliminarDos cosas hacemos mecánicamente cada mañana antes de afrontar el aseo: algunos estiramientos (evité usar desperezarse por hacerlo más fino) y desfruncir el ceño. He asistido con tu poema-relato a la intimidad de tu toilet, Marinel, y hasta aquí ha llegado tu aroma.
ResponderEliminarFemenino ritual, una entrada romática y magica!
ResponderEliminarcada una de tus palabras son el destello de cada ser que va descubriendo el amor o se va el enfriando el amor?
ResponderEliminarY qué triste se pone el espejo cuando te alejas. Presumo que desde su vida inerte cuenta las horas para vuestro reencuentro. :)
ResponderEliminarPor un momento me ha cruzado por la cabeza, ¿lo sabe él? Pero soy tonto, esa pregunta ya tiene respuesta, ¿verdad?
ResponderEliminarQuererse a uno mismo
ResponderEliminares indispensable
para que otros
nos quieran.
Tus versos se perfuman
con encanto.
Un abrazo
Bendita frivolidad la que describes...
ResponderEliminar...y la que te sonríe.
Un beso :)
De verdad veo el domino de tus palabras, la idea y hasta como formas la palabras de esos poemas que haces que son como adivinanza. Muy bonito un beso
ResponderEliminarDominio de si misma, con una gran personalidad...Muy bueno!!!
ResponderEliminarBesos....
Los ayeres enredados en tu pelo dan unos frutos preciosos, Marinel. Haces poesía con perfumes y aromas, con tacones y rubores. Eres mágica.
ResponderEliminarBesicos, guapa.
Una frivolidad exquisita y absolutamente necesaria.
ResponderEliminarBesos
Has descrito de manera poética cada una de nuestras mañanas...
ResponderEliminarSólo que yo debería de sonreír más.
Besos, Marinel.
Gracias a tod@s.
ResponderEliminarQuise romper el hielo de tanta misera femenina con este dejo frívolo quizá,pero que nos acompaña a todas las mujeres.
Para mí los perfumes son decoración vital en mi vida, más allá de joyas u otros abalorios y aquí pongo de manifiesto la pasión que siento hacia ellos.
Besos y abrazos.
Simpática prosa para alguien a quien la mujer desea todas las mañana con ansia y desenfado a la vez para revitalizar la frivolidad que hereda de la ausente noche en el tibio amanecer.
ResponderEliminarToda una alegoría de la mujer hacia un amante silencioso que las envuelve con sus fragantes y húmedos brazos el cuello y demás: Don perfume.
Siempre exquisita y única con tus versos y prosa querida Marinel.
Por eso no dejo de seguirte.
Abrazos.