Extraño soliloquio el que la habita cual rayo de sol en gruta opaca buscando el orificio de salida, aquel por el que entró de madrugada.
Los ojos bien abiertos y distantes, pendientes en un punto muy lejano. Las manos desvaídas de desmayo, el tronco enraizado a la explanada de sábanas revueltas a su antojo.
Crepitan los instantes con enojo en el entorno sin restos de la hoguera.
Fulmina la ventana el astro engominado de dulzura en medio de frialdad propia del tiempo que acontece y piensa en el invierno y como crece.
Regusto amargo en la oquedad custodiada por sus labios.
Es todo un desatino, mentaliza, sentada ante la luna clonadora, mirándose nevada, banaliza: No es oro lo que ven estos mis ojos.
Las venas de su piel se soliviantan mirándola tan blanca que quedan como ríos azulados buscando el mar ansiado.
Es nieve sobre agua, tan pálida y difusa, que cree por un momento que si llueve, mirando hacia el espejo va pensando... será una mota entre la brisa, un éter pletórico de ideas haciéndose marea en la cornisa.
Versos cargados de hermosas imagenes. Te felicito Marinel.
ResponderEliminarBesos
Hermoso,muy hermoso texto,Marinel...
ResponderEliminarSí, a veces (o muchas veces) es tan necesaria una lluvia del alma para palear tantas situaciones; especialmente cuando los inviernos llegan a tocarnos con su frialdad suprema.
Abrazos grandes,con calidez en el alma.
Que bien entras en el esntido profundo de las palabras y las manejas como si fuesen pinceladaspara componer un poema mágico hecho de palabras misteriosas..estoy convleciente de un ataque agudo de artrosis especialmente en rodillas y manos....pero voy remontando...un abrazo inmenso de Begoña
ResponderEliminarMe dejas boquiabierta.
ResponderEliminarMis respetos, poeta.
Dibujas un cuadro hermosísimo con esos pinceles literarios, que manejas con tanta destreza y sentimiento.
Siempre un placer, tu casa.
Cariños varios, Marinel.
He de confesar,la verdad es la verdad y hay que ser honestos, que se me ha ido la vista rápidamente al cuadro que ilustra tu texto. esa melena, esa espalda, esa mano sobre el agua... Pero aunque es un buen acompañamiento,como suele ser habitual,tus versos sueltos son absolutamente sugerentes y son lo mejor de la entrada, plagada de sensaciones. Incluso esa referencia alinvierno es tan acertada...Un saludo
ResponderEliminarA veces ni la lluvia nos salva de esos soliloquios que nos habitan.
ResponderEliminarBesos, Marinel.
Es un verdadero placer volver de mi "auto exilio" y leer tu bella prosa en que plasmas sentimientos mezclados con imágenes de una forma magistral...
ResponderEliminarBesitos en el alma
Scarlet2807
Derramadas tus letras, me bañan en sentimientos reconfortantes...
ResponderEliminarBesos,
El río riega tus orillas, el sol te acompaña camino del mar que ansías, allá serás concha o arena, serás faro o vijía y serás sobre todo tú.
ResponderEliminarUn beso,
PRECIOSAS IMAGENES: FELICITACIONES
ResponderEliminarEn los silenciosos arroyos y en los dulcificados prados cae la lluvia del pensamiento. Pleno de melodía y belleza es tu poema querida amiga. Como un himno que se enciende en el interior del alma. ¡Muy bello!
ResponderEliminarTus palabras de nuevo muy hermosas.
ResponderEliminarSabes encontrar la palabra ideal para cada hueco y encuentras una armonía preciosa.
Besos.
Joker
Muy bueno Marinel!, hermosas imágenes en palabras a la venus del espejo.
ResponderEliminarEspecialmente el último párrafo, lleno de ritmo y candor, resulta emocionante.
bssoss
El cristal de un espejo es mágico, nos desnuda el alma, sin tocarnos siquiera.
ResponderEliminarBesos mil
SIL
Simplemente maravilloso. Eres genial. Saludos cordiales.
ResponderEliminarMe dió la sensación, como si estuviera pensando en su propia belleza desvaneciéndose... perdiéndose en la nada de la imagen.
ResponderEliminarEsa imagen ondeando que con el paso del tiempo se convertirá en nieve en el pelo...
Me encanta el modo poético con que lo pones.
besitos mediterráneos.
Los soliloquios entran y salen de madrugada mientras les dejamos recorrer por completo el interior de nuestras cabezas.
ResponderEliminarNieve sobre agua, que bello Marinel, ser una mota entre la brisa y dejarse mecer por el viento dulce. Huummmmm! Me encanta.
Besicos.
Un bello y etereo instante sin ninguna duda. Cuanta fuerza y cuanta delicadeza alcanzan tus palabras.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo.
qué bonito este poema! me he quedado suspendida en sus imágenes.
ResponderEliminarbesos.
Combinas muy bien las imagenes con tus hermosas letras amiga.
ResponderEliminarque tengas un buen fin de semana.
un abrazo.
Maravillosas letras, como siempre, la imagen acorde al texto. Un abrazo
ResponderEliminarQuerida Marinel,
ResponderEliminarmanejas de forma extraordinaria la prosa lírica,cada frase encierra en sí misma un poema.
Te admiro.
Abrazos y besos
Ante el espejo, un ser desdibujado que no se corresponde con el concepto de mí mismo más que a grandes rasgos, como si sólo contemplara un boceto. O me engaña la vista o me engaño yo mismo.
ResponderEliminarPreciosos pensamientos a la vista de nuestras propias imaginaciones, de nuestros propios sueños. Bellas palabras.
ResponderEliminarUn beso.
Como siempre consigues que tus palabras, tan justas, atinadas y hermosas se tornen imágenes y viceversa, la belleza en su más alto grado, bravo, te lo digo siempre me impacta tu forma de escribir.
ResponderEliminarUn beso fuerte.
El texto me sugiere otras imágenes diferentes a la expuesta. Por eso me quedo con él...
ResponderEliminarBesos
Precioso post, que hay que leerlo entre los entresijos del pensamiento de la vida y de los sueños. El espejo refleja lo que somos uno mismo, tan solo eso… Pero la imagen atrapada dentro del espejo es diferente a nosotros, pues carece de alma y sentimientos. Un beso
ResponderEliminarTremendamente hermoso, metáforas descriptivas del ser, ante una imágen en invierno.
ResponderEliminarEl cierre para mi, espectacular...
será una mota entre la brisa, un éter pletórico de ideas haciéndose marea en la cornisa.
Tienes una pluma bendecida, Marinel.
Abrazos muchos y un lindo domingo.