Quiero mirar la vida como lo hace una flor...
Marinel.

lunes, 11 de noviembre de 2013

De nuevo con Yeste Lima. Esta vez, la gran Isadora Duncan.

De nuevo, de la mano de Yeste Lima, me adentro en el complicado mundo de la biografía, el escribir sobre alguien famoso del pasado, naturalmente...a mi manera. En esta ocasión, me incliné por una de las grandes bailarinas de la historia y decidí alejar la frialdad de biografiarla ateniéndome a números o fechas, de manera que preferí "charlar" con  ella sobre aquella que fue...
Las frases en negrita están sacadas de Google y son de su autoría, así no parece un triste monólogo.



“Si pudiera expresarte lo que se siente, no valdría la pena bailarlo”

Naciste ola, Isadora, ola pequeña destinada a tsunami arrollador, en esa ciudad de calles empinadas que bajan hacia el océano y donde su bahía estaba destinada a esperarte: San Francisco. Viniste como Ángela  Isadora Duncan, y  contigo nació el movimiento en tu interior,  algo que con los años describiste de esta manera:
"Nací a la orilla del mar. Mi primera idea del movimiento y la danza, me ha venido seguramente del ritmo de las olas."


Sufriste junto a tu madre y hermana la desolada vivencia de un progenitor desalmado que pronto os abandonó a vuestra suerte dejándoos desposeídas de todo lo material, que no así del ansia de seguir hacia delante, persiguiendo tus pies, sabedores del camino.
El sufrir encogía tu corazón de niña, te vaciaba de latidos que solo retomaban su bombeo en ese mágico lugar donde el horizonte se hace misterio junto al cielo:  la orilla del mar.


Ahí dejabas al pairo tu sentir mientras danzabas imitando la superficie líquida, dejándote arrastrar por el rumor de las olas, y sus sus vaivenes.

“En la medida en que el sufrimiento de los niños está permitido, no existe verdadero amor en este mundo”

Tu madre era valiente, decida y como profesora de piano que era, te llevó de la mano por el envolvente mundo de la música clásica que formó tándem con las aguas, proyectándose en ti. Tú cuerpo era entonces sinuoso, ondeante, de fibra elástica, natural, libre.
Como ese inmenso acuífero viajero, viajaste tú de un lugar a otro, sin embargo, Europa ejercía una atracción especial en tu interior,sobre todo la civilización griega. Madre y hermanas marchastéis a Londres, lugar donde vagabas absorta por los museos abrazada por el arte en todas sus extensiones, allí estudiaste incansable  las distintas variaciones y los artistas que le daban forma. Grecia, fue la que más hondo caló, la que ejerció la mayor influencia en tus mareas, te hechizó por entero.





 Tanto amaste el arte que acabó por amar ese cuerpo tuyo con el que inventabas  esas coreografías donde  flotabas ligera como la espuma.



“Mi lema: sin límites”

Era la poesía otra de tus armas predilectas para dejar el cuerpo en pos de ella, transmitir los versos a través del movimiento corporal, era tu particular manera de escribir poemas. No todos lo entendieron, Isadora, aunque tu fijación por lo griego,
acabó fascinando al mundo, también el arte de los grandes Rodin o Bourdelle… cuya obra trataste de corporeizar.




Sentías que la danza debía ser una fusión entre mente y espíritu, una perfecta y armónica sincronización inseparable y mágica donde la bailarina fuese parte de la naturaleza, parte de ese fantástico y maravilloso conjunto.
Danza libre, sin las ataduras o atavismos de los bailarines clásicos, por ello renegaste del doloroso calzado impuesto por ellos y danzaste con los pies desnudos, tan desnudos como tu alma en el momento del baile.

"El bailarín del futuro será aquel cuyo cuerpo y alma hayan crecido tan armoniosamente juntos, que el lenguaje natural del alma, se habrá convertido en el movimiento del cuerpo humano. El bailarín no pertenecerá entonces a nación alguna sino a la humanidad"


¡Cuántos grandes conociste, se cruzaron en tu camino de gloria y tragedia!
Te impresionó la gran Pavlova, aquella bailarina rusa que te invitó a conocer Rusia, la danza del país, sus métodos. Estos eran por completo contrarios a tus argumentos sobre la danza. Pavlova ensayaba durante horas, intentando alejar mente y cuerpo, concentrada por entero en enterrar el sufrimiento en búsqueda de la perfección.
En cambio tú, desvestida de esa férrea disciplina, pretendiste siempre el equilibrio entre mente y espíritu. Dos maneras divergentes de sentir y aplicar la danza, de amarla y presentarla al mundo.
Magistrales ambas, elogiadas, admiradas desde todos los confines.
Para ti no había nada mejor que dejarse imbuir por el universo, donde ser una partícula más, una flor o un tenue rayo de sol paseando por la atmósfera, aquella avecilla aturdida buscando refugio bajo la lluvia; la misma lluvia.
Esa voluptuosidad de tu baile en aras de la fusión con el entorno, te llevó a ser denominada como "La Ninfa" además de tu ya sobrenombre:
La bailarina del mar.

"Lo que es contrario a la naturaleza no es bello."

Tus pies descalzos, las túnicas insinuantes sobre tu cuerpo desnudo y cómo no, ese olear de tu silueta, traspasaron fronteras, y así, sin saberlo, fuiste precursora de la danza moderna, un hito en la historia imitado durante generaciones.


Pero no todo era dejarse llevar  por el amor a la danza, también surgió ese otro amor humano y carnal en el que no tuviste suerte...
Muchos fueron los amores en tu vida, azarosa como el mar también en éste sentimiento, sin embargo todos ellos acabaron rotos y a la larga, desaparecidos de manera funesta, lo que llevó a la habladuría de un extraño maleficio ejercido por ti.



La tristeza cuajó en tu interior como los carámbanos en los vértices del invierno quedando pertrechada en ti definitivamente , cuando tus hijos, Deirdre, nacida de tu relación con el escenógrafo inglés, Gordon Craig y Patrick, nacido junto a Paris Singer, hijo del magnate de las famosas máquinas de coser, perecieron en un accidente de coche cayendo al río Sena en París... 

Eso te ahogó a ti, que perdiste el horizonte marino de tu vida.

No obstante, pasado el tiempo, surgiste de nuevo ola y te lanzaste al mar, viajando de nuevo a Moscú, donde sin pretenderlo, volviste a enamorarte, esta vez, del más grande y trágico amor de tu vida:
Sergei Esenin, poeta y actor moscovita, revolucionario apasionado con el que acabaste por contraer matrimonio.
Fue inmenso vuestro amor, lo fue hasta que os alejasteis de Rusia marchando a Europa, donde al poeta se le agotó la inspiración y ello lo llevó a ahogarse en alcohol en un intento de mitigar la desesperación. La violencia hizo acto de presencia dando por terminada la relación que pasó del estadio de la felicidad al dolor.

"El amor puede ser un pasatiempo o una tragedia."


Necesitaste tiempo para entender que tanto dolor acumulado había de desbocarse de nuevo en tu danzar, pero ya nada era lo mismo. Tus incondicionales dejaron de serlo tanto y tu cansancio era mayúsculo, así pues, decidiste instalarte en Niza para terminar el ya comenzado libro de tu vida.
En ese lugar te encontró la muerte un día cualquiera, la burlesca y cruel muerte, que hasta el último momento quiso preservar en ti el trágico halo de misterio.
Viajabas tú en tu coche, rodeado tu cuello con un sutil pañuelo rojo que parecía danzar al viento, ese viento que lo llevó a enredarse a una de las ruedas... y estrangularte.


"Adiós amigos, yo voy a la gloria."

*Ah, siempre lo olvido...aquí tenéis los enlaces de los demás participantes, 
aunque tal vez debiera decir las, pero nos salva Miguel...:

-Yeste Lima

-Nieves

-Miguel

-Mª José

-Anabel

-Lehahiah

-Luisa

-Inma

31 comentarios:

  1. Uau, Marinel!, es la segunda que leo, la primera me ha emocionado, pero la tuya, me ha puesto la piel de gallina, qué bien has contado esa "Charla" tan bien expuesta y presentada, has conseguido que viviera los momentos metiéndome en la felicidad de sus logros, pero lo que es mejor, meterme en sus momentos difíciles y trágicos.

    Siempre me guistó esta mujer, sabía de cómo había sido su muerte, en accidente de coche, pero no sabía que había sido a consecuencia de su pañuelo al cuello.

    Muy, muy interesante, Marinel, orgullosa de tu participación y gracias por seguir con nosotros.
    Besos apretaos.

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  2. Que bien te ha quedado, eres especial, te dan unas pautas y creas una obra. Enhorabuena por un trabajo estupendo y abrazos

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  3. Desde luego os vais superando unas a las otras y ahí vengo yo, que soy el único que hago de verdad una tontá.
    Os lo advierto, el premio debería ser para mí por ajustarme al espíritu de la convocatoria.
    Preciosa entrada. ¡Enhorabuena!

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  4. excelente intervalos , logrado texto, y profunda mirada Marinel
    felicitaciones

    sin duda quien amor lo hizo junto con el dolor
    eso es pasión pura

    besitos

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  5. Magnifica aproximación a la gran Isadora.

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  6. Marinel. Menudo nivel de entrada. Qué pasada!!! Me ha gustado muchísimo la forma de narrarla, la alternancia de esas frases encomilladas y descubrir a un personaje al que no conocía.
    Enhorabuena y besos mil

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  7. Isadora Duncan ha sido una de los personajes de la historia del arte que más me ha llegado. Bella mujer, bella bailarina, bella poeta que conjugó danza, poesía, cuerpo y alma. Completita.

    Gracias por traerla.

    Besos.

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  8. Has hecho un bello ejercicio de prosa poética, Narinel, una biografía reconvertida en página magistral. Te felicito.
    Un beso.

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  9. Una forma estupenda de presentarnos a esa gran bailarina que fue Isadora Duncan. No conocía prácticamente ningún detalle de su vida, salvo su trágica muerte, pero me ha parecido que nos has hecho una semblanza estupenda de su vida y sus sentimientos.
    Chapó. Un beso.

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  10. No tenia ni idea de esta bailarina, la verdad es que la danza y yo... Una vida azarosa pero apurada pues nada se puede escribir de los que no nada han vivido. Muy entretenida tu visión de la "tontá", me ha encantado!
    Un saludo desde mi infierno.

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  11. Te felicito, preciosa.
    Es una biografía perfecta, cómo se nota que en tu casa, baila la danza...
    Y del mar, fue al mar, la gran Isadora Duncan.

    Besos, mi Uka.

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  12. Marinel, una maravilla las letras parecían bailar como la Duncan.
    Ye felicito.

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  13. Isadora Duncan la musa de la danza. Una de las más grandes. Desarrolló una nueva forma de baile que rompió con todos los criterios del ballet clásico.
    Dedicó su vida a hacer de la danza, una obra de arte legítima.
    M encanta la danza, de cría seguí algún curso, pero, no debería ser lo mío cuando al segundo año abandoné. Otra de las cosas que me arrepiento de no haber hecho.
    Se que tu hija es buena, que siente un gran amor a la danza, en una entrada lo decías, así que mi gran apoyo y ánimo para ella. Es muy difícil y sacrificado, lo se,
    pero con pasión, se consigue todo.

    Mi felicitación también, por esta bella entrada.

    Besos guapa.

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  14. Maaaadre mía MARINEL, vaaaya recorrido tan precioso e increíble has hecho por la vida pero sobre todo por la manera de sentir de esta increíble bailarina que revolucionó el concepto que de la danza se tenía en su tiempo. Indudablemente a parte de sus cualidades como bailarina lo que de verdad hizo especial e intemporal a Isadora Duncan, fue su pasión por expresar más allá de la ortodoxia de la época una forma personal y libre de moverse, supongo que porque su interior fue así, libre y adelantado a la época que le tocó vivir... su trágica muerte casi se hacía imprescindible como broche a una existencia absolutamente novelesca.


    Graaacias preciosa... además de tu poesía preciosa de siempre esta vez has hecho algo para mi dificilísimo biografiar a un personaje con alas de mariposa por otra... tan bonita como la de tu cabeza Mmmmm meeencanta el formato que tiene ahora tu blog... vaya que ha sido una delicia este paseo en tu casa bonita.



    Un beso inmeeeeeenso mariposa azúl jajaja yaaa tenemos una cosa más que nos une :))

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  15. Marinel, has emulado a Isadora Duncan...Has tomado una a una las olas del mar en tus letras, y las has movido con el sentimiento creando una gran sinfonía...Isadora ha disfrutado enormemente bailando en tus lineas-olas, nos ha dedicado una danza magistral, dirigida siempre por tu batuta apasionada, entrañable y creativa...Mi felicitación por esta bella historia, llena de ritmo y armonía.
    Mi abrazo grande y mi cariño,amiga.
    M.Jesús

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  16. En una expresión muy dedicada, llena de admiración, y con mucha belleza (no excenta de plasticidad) haces un homenaje más que merecido a Isadora Duncan...
    A mi lo que siempre me llamó la atención, después de su tan agitada vida, es la forma en que murió...estrangulada por su propio pañuelo largo...
    Debe ser porque también los uso.


    ABRAZO GRANDE, Y BENDICIONES SIEMPRE, MARINEL.

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  17. Mi querida Marinel me ha encantado la manera tan bella de relatar la vida de esta gran bailarina que tan trágica muerte tuvo.
    Besos

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  18. Me encanta la Duncan, su perseverancia, su valentía, su rebeldía, hasta su osada irreverencia.

    Te ha quedado divina, Marinel, divina.

    Abrazos muchos y linda semana

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  19. Marinel, conocía pinceladas de esta gran mujer.
    El hecho de que me la hayas presentado de una manera tan cercana, haciéndome entender, según mi percepción hasta sus sentimientos, me ha resultado muy instructivo y de gran riqueza.
    (Y que bien escribes, Marinel y sobre tantos temas...)

    Besos fuertes ♥♥♥

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  20. Hermosa evocación! Que nos ha hecho recordar, de una forma muy original y poética, a la gran Isadora Duncan. Me ha encantado la forma y el fondo de esta prosa poética, Marinel. Eres muy buena, excelente escritora. Un fuerte abrazo.

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  21. Con ese lema se llega muy lejos. Esta mujer que rompio moldes lo hizo de puntillas pero con paso firme. Muy emotiva la evocación siguiendo sus pasos. Y muy pertinente traerla a la memoria. Un abrazo

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  22. Ey, muy poco sabía de esta mujer.

    Gracias.

    Me ha encantado el formato en segunda persona, lo hace infinitamente íntimo.

    Muchos besos.


    SIL

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  23. Qué maravilla Marinel, has hecho una biografía magistral de Isadora Duncan, distinta a todas, y con esos aires marinos y de libertad que ella transmitía con su danza…
    Desde luego innovó y revolucionó, siendo en alguna medida precursora de la danza contemporánea… aunque yo diría que su danza es única, no ha vuelto a haber nada igual… en Francia se pusieron de moda las "écoles de danse Isadora Duncan" a mediados del siglo pasado a las que acudían las 'niñas bien'… pero la cosa no cuajó.
    Por cierto, no sabía que el écharpe era rojo… no sé porqué siempre imaginé que era blanco…

    Bellísimo Marinel, mil gracias y besos

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  24. Maravilloso Marinel!!! una mujer que sin duda alguna se ganó la gloria. El arte se lleva dentro y Duncan supo demostrarlo. Me ha encantado!!!
    Muchas gracias por compartir.
    Feliz semana, abrazos...Pilar

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  25. Te felicito por tan perfecto trabajo

    Desde principio a fin logras mantener la trama que nos adentra y avanza por el mundo y la vida de Isadora.

    Conocía lo trágico de su muerte, pero no lo extra-trágico de la muerte de sus hijos.
    Tanto dolor...

    Besos

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  26. No la conocía, pero me ha impactado. Magnífica aproximación a la historia de esa gran artista.

    Un beso.

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  27. Una intensa vida expuesta de en forma de reportaje. La lectura me sitúa junto a los pliegues de la bailarina.
    Besos sin tanto ajetreo.

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  28. Creyó en ella y se trabajó a la suerte, no la esperó quieta como suele suceder.

    Una vida muy intensa tanto en lo bueno como en lo malo, es lo que tiene cuando se vive todo con pasión.

    Besotes hermosa!

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  29. Hola Marinel , un maravilloso recorrido por la vida de Isadora Duncan. Su danza era magnética, turbadora y apasionada …


    Un cálido abrazo.

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  30. Precioso recorrido por la vida de una de las grandes.
    Isadora enseñó a las generaciones futuras lo que sería la danza moderna, como bien dices.
    Besazo. Me ha encantado.

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  31. No me extraña que hayas quedado ganadora. Mis merecidas felicitaciones.

    Saludos y feliz fin de semana.

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Has llegado a mi isla.Bienvenido/a. Ahora eres parte de ella...relájate. Estás en tu casa, en tu isla...

Unas palabras profundas...

Ahí afuera, mas allá de ideas de bien o mal,

hay un lugar.

Nos vemos ahí.

Cuando el alma yace sobre la yerba.

El mundo esta demasiado lleno para hablar de él.

Las ideas, el lenguaje, incluso la frase 'cada uno'

No tienen sentido.



"Yalal ad-Din Muhammad Rumi"
















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