Los observo desde una distancia indefinida.
Ni lejos, ni cerca, ni encima.
Lleno.
Medio.
Vacío.
¿Con qué vaso me quedo?
Necesito del vacío para mi soledad abigarrada,
para la paz del alma y la quietud de algarabías.
No beber nada. Convivir en ella. Sentirla hasta la fusión
y no ser por momentos más que un trozo de humanidad perdida.
Necesito del medio para el equilibrio, para ver más o menos
huyendo de lo homogéneo porque nada es idéntico.
`Para afligirme si lo aproximo al vacío inapetente
o congratularme con el mundo si lo veo rozando el borde.
Necesito el lleno para esquivar oquedades desapacibles,
para mirar el medio arañando el desánimo y verlo caudaloso
y a punto del vertido hacia mi esencia abatida.
Los tres me quedo.
Cada uno en su lugar y en su momento,
que por cierto no siempre elijo.
¿Mi vida son tres vasos?
¿Todo lo traduzco a eso?
lo importante es el agua ingerido, y que ha permitido hacer, y el que espera para que sigas existiendo
ResponderEliminarEl que reposa....se enfanga
besos
Noel, la verdad es que he ingerido e ingiero mucha agua...si eso sirve para seguir existiendo...
EliminarSeguiré el consejo.
:)
Besos.
Sin agua no podemos vivir y necesitamos un recipiente para beber. La cantidad cada uno la sabrá, o debería.
ResponderEliminarBesos.
Alfred, yo no podría, soy sedienta desde que recuerdo y recipientes hay muchos de los que beber...el mundo está lleno de ellos para aleccionarnos. Y la medida, pues, no siempre acertamos, pero somos quienes deciden hasta cierto punto, sí.
EliminarBesos.
La vida son más que tres vasos y en el fondo de su corazón tu protagonista lo sabe.
ResponderEliminarUn abrazo.
Rafael, sí...para qué voy a mentir...lo sé. Pero me salen estas cosas, Rafael, y yo les doy vía libre.
Eliminar:)
Un abrazo.
El vaso vacío, medio o lleno significan nuestro ánimo u optimismo ante la vida...Estoy de acuerdo contigo, cada uno de ellos cumple su misión, todos se alternan y se complementan, porque vamos cambiando, transformándonos, madurando...Cada momento es distinto y único...Y a veces los vasos se convierten en fuente, río o catarata...
ResponderEliminarMi abrazo y feliz finde, Marinel.
Mª Jesús, así es, de eso tratan mis letras, de las distintas visiones que vamos adoptando frente a los sucesos que nos rodean y tiene preparada la vida para nosotros.
EliminarUn fuerte abrazo.
Muy buena explicación, que me hará ver en lo sucesivo, con otros ojos los medios y los vacíos.
ResponderEliminarUn abrazo.
Sara, me alegra que te sirvan de algo mis letras. Yo suelo dar salida a lo que me nace sin calentarme mucho el seso y a veces ni yo misma me entiendo.
EliminarNo es éste el caso, sin embargo.
Un abrazo.
MUY SABIAS TUS LETRAS.
ResponderEliminarABRAZOS
RetiH, gracias. No es filosofía ni nada de eso, pero gracias.
EliminarAbrazos.
Lo importante es que esos tres vasos te permiten escribir un poema.
ResponderEliminarY todo lo demás, también.
Besos.
Toro, suelo pensar que la vida a pesar de los pesares, vale la pena y que ha de tener algo espléndido a la vuelta de una esquina...así que, bueno, mientras escribiré de vasos o lo que sea.
EliminarGracias.
Besos.
Los tres vasos pueden representar los distintos estados de ánimos, los puedes necesitar a los tres, pero el mejor quizás el lleno, representa la vida por su contenido: agua...
ResponderEliminarMuy interesante entrada, me encanta.
Te sigo.
Un abrazo.
Mari Carmen, pueden ser los distintos estados de ánimo, claro que sí. Siempre se suele hacer esa famosa similitud del vaso medio lleno o medio vacío según nos encontramos anímicamente, así que el lleno ha de estar también.
EliminarSomos agua en gran medida, por eso nos atrae tanto.
Gracias y un abrazo.
Somos lo que sentimos y según nos encontremos rebosamos agua o nos falta.
ResponderEliminarTu poema es hermoso.
Un beso, Marinel.
Muy original similitud como siempre, sorprendes con tu poesía siempre nueva, siempre fresca, un placer leerte. Abrazos Marinel.
EliminarCarmela, así de simple y cierto, tienes razón.
EliminarY yo, como siempre...dándole mil vueltas inútiles, jajajaja
Gracias.
Un beso.
Maru, no es gran cosa mi similitud, no creas...desde que recuerdo se ha hablado de los vasos llenos, medios o vacíos, pero bueno...me salió y lo dejé.
EliminarMil gracias.
Un gran abrazo.
No puedo responder por ti, pero si sé que no siempre podemos elegir, a veces ni siquiera queremos. Me ha encantado tu analogía la historia recurrente de los tres vasos y la vida. Un abrazo
ResponderEliminarEster, qué haces tú por aquí en domingo?!
EliminarMil gracias por la deferencia, hermosa.
Huy no, no siempre podemos, por no decir casi nunca, por eso cuando podemos elegir, hay que valorar ese privilegio.
:)
Gracias.
Un abrazo grande.
Lo has explicado muy bien para crearme la duda a mí también.
ResponderEliminarTracy,seamos dos dudando, pues...
Eliminar:)
Ahhhh! pues a mi nunca se me hubiera ocurrido todo eso por tres vasos....claro, yo vivo en el manicomio! :DDDDD
ResponderEliminarBesos =))))
Liliana, jajajaja
EliminarCreo que voy a arrojarte un vaso de agua fría:
Todos vivimos ya en un gran manicomio!!!
Besos :)
Somos vasos de emociones que desbordan y cuál rio ...toman su propio cauce y tino.
ResponderEliminarTe dejo mi abrazo de luz y agua ☆
AtHeNeA, así somos, es verdad...
EliminarAbrazo de luz para ti.
Habría que aceptarlo todo en la vida por mucho que cueste.
ResponderEliminarAunque es mejor mirar siempre con optimismo, porque el desánimo hunde.
Abrazos.
Amapola, de hecho lo aceptamos...no queda otra. El optimismo es ideal...por eso hay poco.
Eliminar;)
Abrazos.
Estoy de acuerdo con tu visión de la vida, mi querida Marinel: yo también me quedo con los tres, y también con la certeza de que la vida es un misterio que jamás terminaremos de comprender.
ResponderEliminarUn beso grande ;)!
Fer
Fer, jamás.
EliminarAsí que a vivirla y ya sabremos de otros misterios...
Un beso grande.
Cada vaso cumple su misión, son como cada momento de la vida, y nos vamos adaptando a ello según las circunstancias.
ResponderEliminarUn cálido abrazo Marinel.
Sneyder, así es, no cabe duda.
EliminarMe gustó exponerlo, sin más.
Cálido abrazo para ti.