Una levedad.
Algo apenas nada.
Un vórtice afable.
Un débil suspiro siempre lazarillo
de la indómita emoción.
Fenezco el entorno por unos segundos
haciéndome ausencia.
Más tarde alborozo el reloj,
enajeno el mundo de sus manecillas
y juego a pillar mil haces de luz
cual si las luciérnagas naciesen
para mi capricho.
Suelo ser un soplo que viene
y que va y entre ida y vuelta,
te toma las manos llevándote
lejos de tu bienestar.
Te traigo hasta mi y mi pensamiento
que ríe contento habiendo
viajado sin hacerle falta caminos o mar.
Soy como esa flor que bordea tu senda
y entre la maleza muestra un esplendor
bravío y efímero:
Una levedad.
Un suspiro como esa flor que alumbra en el corazón de tu protagonista.
ResponderEliminarUn abrazo.
Rafael, es bueno saberse leve como un suspiro.
EliminarUn abrazo.
El poema una delicia, y tú eres mucho más grande.
ResponderEliminarBesos Marinel y disfruta del fin de semana.
Rafa, gracias y gracias.
EliminarGrande tú y tus cosas siempre tan divertidas y jugosas.
:)
Besos y feliz finde.
De mucho peso poético
ResponderEliminarBesos
Noel, no es precisamente el peso lo que buscaba sino la ligereza.
Eliminar:)
Gracias y besos.
Este poema es maravilloso, magnífico, una preciosidad.
ResponderEliminarEs uno de los mejores poemas que te he leído.
ERES MUY GRANDE!!!
Besos.
Toro, muchas gracias!!!
EliminarLa verdad es que no lo siento yo así, pero me encanta que lo vea alguien de ese modo.
:)
Ufff, me abrumas.
De nuevo, muchas gracias. Eres un encanto.
Besos.
Y qué es más hermoso que una levedad??.... nada.
ResponderEliminarEs muy hermoso el poema, Marinel. Mucho.
Un beso.
Carmela, la levedad tiene la hermosura de lo sutil y delicado y a mi todo eso me encanta. Ya tenemos bastante vorágine alrededor.
EliminarGracias.
Un beso.
Tenue y leve, delicada y gentil, así te siento, como la amapola de belleza inigualable que por que no la copien es efímera. Es la amapola mi flor preferida, es mucho mas que una flor para mi. Abrazos
ResponderEliminarEster, mil gracias por sentirme de ese modo. A mi me encanta lo delicado y gentil, las cosas suaves y esponjosas, la gente así también.
EliminarTú sabes, creo, que te admiro muchísimo precisamente por todo eso que reúnes y utilizas para enseñarnos tanto.
Es una flor como lo que hablamos. Mucho más que una sencilla flor, tienes razón.
Abrazos y gracias.
Hoy te has hecho aún más grande con este pedazo de poema.
ResponderEliminarTracy, caray...lo que son las cosas...lo escribí de un tirón sin dejar que la mente pensase mucho y mira...os gusta y todo!!!
Eliminar:)
Mil gracias.
Ahí y no en otro enclave está la grandeza: en la levedad!
ResponderEliminarBesos, Marinel
Pilar, lo leve tiene una magia especial, no cabe duda!
EliminarBesos.
Es precioso el poema.
ResponderEliminarCoincido con Toro.
Besos.
Amapola, muchas gracias, guapa.
EliminarBesos.
Hola Marinel: ¡Enhorabuena por tu blog que sigo desde hace mucho tiempo.
ResponderEliminarMe gustaría invitarte a ti, y si lo juzgas oportuno, a los lectores tuyos que te parezcan interesantes a lo siguiente
PARTICIPAR COMO ESCRITORES EN MI PRÓXIMO LIBRO DE CARÁCTER BENÉFICO: "MIL PALABRAS PARA EL OPTIMISMO". El libro que saldrá tanto en versión digital como impresa en Amazon en unos 3 meses, constará de una recopilación de reflexiones, poemas, relatos cortos y ensayos míos sobre el optimismo. Y también de una aportación de otros amigos, lectores, escritores y amantes de la lectura en general, que deseen aportar su propio granito de arena con sus opiniones, reflexiones, anécdotas,recomendaciones, poemas, relatos o comentarios sobre el optimismo. (EL OPTIMISMO VISTO POR LOS DEMÁS)
Será pues un libro coral y se detallará en portada/contraportada el nombre de los participantes seleccionados. Los beneficios se donarán a UNICEF.
Enviar los textos (hay libertad en cuanto a la extensión, modalidad y número de textos por persona) a este e-mail: francisco.rodrigueztejedor@gmail.com.
Saludos cordiales.
FRANCISCO RODRÍGUEZ TEJEDOR
www.franciscorodrigueztejedor.com
Francisco, ante todo, muchas gracias por seguir este mi humilde blog de intentos poéticos.
EliminarY gracias también por la deferencia de haber pensado en mi para tu libro benéfico. Trataré de pensar algo que pueda servirte, aunque como ves...sólo escribo por afición y por impulsos, sin darle muchas vueltas a lo que derramo, por lo que no sé yo si soy digna de ser partícipe de algo tan bonito.
Aún así, como te digo, pensaré a ver si me sale algo lo suficientemente válido y de ser así, te lo enviaré.
Saludos cordiales.
Es divino, Marinel. Hiciste magia.
ResponderEliminarUn beso de anís.
Sara, mil gracias por verlo así, algo totalmente inesperado por mi, la verdad.
EliminarBeso de anís para ti.
Bellísimo.Besos Marinel
ResponderEliminarCapitán, montones de gracias.
EliminarBesos.
Una levedad: nada es eterno. Por eso se aprecia y admira tanto...
ResponderEliminarBesos
Luis Antonio, nada lo es, cierto. Nos quedaremos con disfrutar de lo leve...
EliminarBesos.
Lo bueno si breve dos veces bueno, eso dicen, así que en la levedad debe haber ese placer de lo que se nos escapa, de lo que nos parece efímero ypor ello queremos retener más si es posible, por ello lo vivimos más intensamente. Un abrazo.
ResponderEliminarMaru, imaginemos que así es porque todo lo fugaz no siempre es grato, pero tiene la ventaja de la brevedad.
EliminarY cuando es grata esa levedad, si la eternizásemos, dejaría de serlo...
Gracias y un gran abrazo.
Justo así me siento yo una levedad pero con necesidades.
ResponderEliminarBesitos
Inma, una levedad cuyas necesidades se verán satisfechas y pasarás a ser una completa levedad...con otras necesidades.¿Quién no las tiene de una manera u otra?
EliminarBesos.
Preciosa levedad de amapola y palabras Marinel.
ResponderEliminarBuen lunes.
Besos.
Laura, gracias, me alegra que te guste.
EliminarBuen lunes para ti también.
Besos.
Disfrutemos de la levedad hay una intensidad más duradera.
ResponderEliminarFeliz día
Besos
José Manuel, sí, lo leve puede ser intenso también y perdurable en la memoria.
EliminarFelices días.
Besos.
Levedad, y, en esa levedad, tensa la cuerda floja el ser humano y se contorsiona entre lo trascendental y lo trivial; es, en un momento cenit y en el otro nadir, alborada y crepúsculo, pecado y virtud, un antípoda de si mismo pero, ¡ay, levedad, un ser humano!
ResponderEliminarMe ha gustado tu poema apreciada Poeta.
Gustavo, somos leves sin duda...entre un nacimiento y un morir...apenas nos separa nada.
ResponderEliminarAsí es la vida...levedad.
Mil gracias.
Un abrazo.
LEVE, SUTIL Y ELEGANTES TUS PALABRAS
ResponderEliminarUN ABRAZO
Tracy, muchas gracias.
EliminarUn abrazo.
Eres una amapola transparente... y bella. Besos.
ResponderEliminarJulie, ya me gustaría ser como una bella amapola, pero no, sólo soy una persona mirando más allá de las cosas.
Eliminar:)
Gracias y besos.
La insoportable levedad del ser!!!
ResponderEliminarBellísimo Marinel, me quito el sombrero!
Besos =)))
Liliana, efectivamente ;)
ResponderEliminarMuchas gracias.
Besos :)
Dicho así,como solo tú sabes decirlo,pareciera que esa levedad que habita en nuestra esencia y que forma parte de nosotros de por vida, sea la fuerza más poderosa de todas las que existen en el universo.Maravillosa levedad y maravilloso poema.
ResponderEliminarUn abrazo
Dicho así,como solo tú sabes decirlo,pareciera que esa levedad que habita en nuestra esencia y que forma parte de nosotros de por vida, sea la fuerza más poderosa de todas las que existen en el universo.Maravillosa levedad y maravilloso poema.
ResponderEliminarUn abrazo