Esas cosas que parecen tan sencillas, luego no lo son tanto, el aroma de un buen café, anda que no es difícil hacer uno que sea a café, que tenga olor y sabor, esto no lo hace cualquiera, como no soy muy de yogures de esto no te puedo hablar pero tomarte uno que este cremoso y que no engorde es una cosa contradictoria.
Un abrazo y perdona por amargarte las cosas sencillas.
Emilio, ja,ja,ja No tengo nada que perdonarte, se nota que tú eres así en todos tus comentarios...de sacarle punta a todo. Hay café buenísimo y yogures que no engordan y son cremosos, te lo digo yo. Un abrazo.
Bonito lo que dices, pero a mí los amaneceres como que me gustan poco, porque como duermo muy mal, a esas horas es cuando me entra la pájara. Al café por supuesto me apunto.
Rafa, entiendo lo que dices y debe ser un infierno. A mí me pasa poco lo de dormir mal y luego ir como un zombi, pero es verdad que cuando me pasa, odio ese amanecer en el que acaba de llegar el sueño. Café para todossss! Besos.
Sí esas son las cosas cotidianas que cuando son bellas nos llenan de satisfacción. Igual lo cotidiano puede ser problemático y nos llena de insatisfacciones.
Desde el poder percibir la primera luz, desde el primer pestañeo y decir: estoy viva...todo eso tan indispensable ya es digno de alegría y agradecimiento...
Verdad es que hay pocos momentos tan intensos como el amanecer, queda todo un día para ser feliz, es la llave que la vida te da diariamente. Me encanta leerte. Un beso.
Lola, es el moemento de iniciación al día, casi como un ritual indispensable para romper definitivamente con la noche y es mío, mío, mío. :) Mil gracias. Un beso.
Hay que dar las gracias por cada día que amanecemos y abrir los ojos dispuestos a vivir el día con todo lo bueno y positivo, y si es acompañado de un buen café sin mucho azúcar y un yogur de cereales, pues estupendo, y si te lo traen en bandeja, y si, y si...
Riqueza de lo cotidiano, oro para muchos y un sueño imposible para otros tantos también. Siempre presentes los contraste querida Marinel. Exquisita tu manera de abrir la boca al inicio del día. Besos Marinel
Lo que es un regalo es amanecer...
ResponderEliminarBello
Besos
Trini, sin duda es el mejor de los regalos.
EliminarBesos.
Esas cosas que parecen tan sencillas, luego no lo son tanto, el aroma de un buen café, anda que no es difícil hacer uno que sea a café, que tenga olor y sabor, esto no lo hace cualquiera, como no soy muy de yogures de esto no te puedo hablar pero tomarte uno que este cremoso y que no engorde es una cosa contradictoria.
ResponderEliminarUn abrazo y perdona por amargarte las cosas sencillas.
Emilio, ja,ja,ja
EliminarNo tengo nada que perdonarte, se nota que tú eres así en todos tus comentarios...de sacarle punta a todo.
Hay café buenísimo y yogures que no engordan y son cremosos, te lo digo yo.
Un abrazo.
Son esas cosas sencillas las que nos alegra el amnecer y nos da fuerzas para enfrentar el día.
ResponderEliminarCariños...
Oriana, detalles ellos que nos aferran a la vida gratamente.
EliminarCariños.
A mi siempre me han gustado las cenas que terminan con un desayuno en la cama. Saltos y brincos
ResponderEliminarEster, ja,ja,ja que bueno.
EliminarA mí también.
Saltos y brincos.
Adoro los amaneceres con aroma del café y que la mente divague, me ayuda vivir.
ResponderEliminarBesos.
André
André, es ese momento a solas con la mente mientras baja el café por la garganta humeante como las divagaciones...
EliminarBesos.
Cualquier amanecer es, en sí mismo, un regalo.
ResponderEliminarUn beso para que te rocíe el próximo amanecer de sensaciones , como las que tienes en cada uno de ellos.
José Antonio, cierto, cada amanecer es un regalo más.
EliminarGracias por ese beso sensacional.
:)
Otro para ti.
Bonito lo que dices, pero a mí los amaneceres como que me gustan poco, porque como duermo muy mal, a esas horas es cuando me entra la pájara. Al café por supuesto me apunto.
ResponderEliminarBesos Marinel.
Rafa, entiendo lo que dices y debe ser un infierno. A mí me pasa poco lo de dormir mal y luego ir como un zombi, pero es verdad que cuando me pasa, odio ese amanecer en el que acaba de llegar el sueño.
EliminarCafé para todossss!
Besos.
Ya sabes lo que te voy a decir ¿no?, pues eso... que si puede ser un té.
ResponderEliminarTracy, a cualquier hora un tecito, pero por la mañana no hay quien me separe de mi café y mi yogur.
EliminarQuien no disfruta de un bello amanecer acompañada de todo aquello que quiere y con un buen café.
ResponderEliminarBesos
Ilesin, pues eso, ¿quién no?
EliminarBesos.
La felicidad está en las pequeñas cosas.
ResponderEliminarMuy muy bonito ;)
Yiya, bienvenida y gracias por dejar tu huella.
EliminarEstoy completamente de acuerdo.
Gracias.
No soy de café pero cada amanecer para mi es una nueva vida, volver a empezar.
ResponderEliminarBesos,
Saudades, pues yo sin mi café matinal y mi yogur, no soy persona.
EliminarEso sí, estamos de acuerdo en lo demás.
Besos.
Ay sí Marinel, nada como disfrutar lo sencillo.
ResponderEliminarLa foto es genial!
Un beso
Milena, es que es de lo mejorcito de la vida.
EliminarSí, la foto es chulísima.
Un beso.
Sí esas son las cosas cotidianas que cuando son bellas nos llenan de satisfacción. Igual lo cotidiano puede ser problemático y nos llena de insatisfacciones.
ResponderEliminarPero éstas en particular nos llenan de felicidad.
Un gran abrazo poetisa.
Aída, tienes razón la sencillez puede ser bonita y fea, según qué cosas y qué momentos nos brinde.
EliminarUn gran besazo para ti, encanto de persona.
Volver a vivir cada amanecer, así de sencillo, hasta sin café.
ResponderEliminarBesos
José Manuel, hombre pues sí, pero un cafetito para celebrarlo a mí me encanta.
Eliminar:)
Besos.
El amanecer cuando es apreciado...suele poner luz en la risa y en el café...(sonrío)
ResponderEliminarMi gratitud y mi abrazo siempre, poeta y amiga.
M.Jesús
Mª Jesús, es cierto, cuando es grato, amanecer en sí mismo ya lo es, todo sonríe alrededor.
EliminarGracias siempre.
Un abrazo.
Siempre que el amanecer sea por voluntad y no un madrugón por un trabajo rutinario, es grato disfrutarlo.
ResponderEliminarBesos en plena deriva de la tarde.
Nómada, pus fíjate que a mi no me molesta madrugar y trabajar ahora es un regalo así que no podría quejarme tampoco de eso.
EliminarBesos.
Desde el poder percibir la primera luz, desde el primer pestañeo y decir: estoy viva...todo eso tan indispensable ya es digno de alegría y agradecimiento...
ResponderEliminarBellísimo.
Abrazo grande!
Maritza, cada dí es un regalo de valor incalculable, tienes razón.
EliminarGracias.
Abrazo grande.
Hola Marinel, y si es en buena compañía mejor que mejor:)
ResponderEliminarBesos.
Piruja, claro, eso siempre!
Eliminar:)
Besos.
Frescos aromas
ResponderEliminarpara un alegre amanecer.
Besos
Marisa, sí, cosas bonitas que nos hacen felices.
EliminarBesos.
Pura delicia...
ResponderEliminarLo comparto todo... pero sin yogur, eh??
;-)
Besos, princesa.
Eva, ja,ja,ja
EliminarSobre gustos...sabores.
;)
Besos muchos.
El café de la mañana es para mi, el momento más solemne y mío del día, sabias letras amiga mía.
ResponderEliminarBesos de luz que estés muy bien.
Gladys, compartimos gustos. Es mi momento especial también.
EliminarBesos muchos.
Verdad es que hay pocos momentos tan intensos como el amanecer, queda todo un día para ser feliz, es la llave que la vida te da diariamente. Me encanta leerte. Un beso.
ResponderEliminarLola, es el moemento de iniciación al día, casi como un ritual indispensable para romper definitivamente con la noche y es mío, mío, mío.
Eliminar:)
Mil gracias.
Un beso.
Sí, el yogurt tiene múltiples usos y sabores
ResponderEliminarNoel, sí...ja.ja.ja
EliminarNo digo más.
Hay que dar las gracias por cada día que amanecemos y abrir los ojos dispuestos a vivir el día con todo lo bueno y positivo, y si es acompañado de un buen café sin mucho azúcar y un yogur de cereales, pues estupendo, y si te lo traen en bandeja, y si, y si...
ResponderEliminarBesotes mañaneros!
Ion, no sigas que se me hace la boca aguaaaaa
Eliminar:D
Besos muchos.
Riqueza de lo cotidiano, oro para muchos y un sueño imposible para otros tantos también. Siempre presentes los contraste querida Marinel. Exquisita tu manera de abrir la boca al inicio del día. Besos Marinel
ResponderEliminarLeticia, son las mayores riquezas y las más infravaloradas aún sabiendo como sabemos que muchos son los que ni un desayuno tienen...
EliminarBesos.
Adoro ese café al amanecer... es un rito en mi casa
ResponderEliminarbesos
carlos
Carlos, un magnífico ritual sin duda.
EliminarBesos.
La primera vez que amanecí sobrio, fue en un cuartel militar y la sorpresa no fue para contarla.
ResponderEliminarUn bsazo
Spaghetti, supongo que aprenderías la lección,¿no?
EliminarUn beso.
BUEN EJERCICIO PARA ARRANCAR EL DÍA.
ResponderEliminarUN ABRAZO
Reltih, el mejor sin duda.
EliminarUn abrazo.
Pues si, un amanecer sin café no es amanecer, estirando los brazos mientras la cafetera canta aromas...
ResponderEliminarDelicioso!
Julie, verdad?
ResponderEliminarEs de lo mejorcito del día!
Momentos mágicos que no siempre apreciamos.
ResponderEliminarEl amanecer es el momento más vital del día, es como renacer cada mañana con el sol.
Jerónimo, cierto todo lo que dices. Es un ritual, una especie de celebración matinal, apetitosa e íntima.
ResponderEliminarPrecioso amanecer.
ResponderEliminarYo adoro el mate amargo y el silencio de esa hora.
Besote.