En la zona abisal del océano quedó anclado el olvido
cual símbolo ante el embate de mareas que llevaron
al naufragio aún antes de zarpar.
Allá en lo profundo chirría la herrumbre dolorida
del mar que no arribó...
Quiero mirar la vida como lo hace una flor...
Marinel.
lunes, 5 de mayo de 2014
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Unas palabras profundas...
Ahí afuera, mas allá de ideas de bien o mal,
hay un lugar.
Nos vemos ahí.
Cuando el alma yace sobre la yerba.
El mundo esta demasiado lleno para hablar de él.
Las ideas, el lenguaje, incluso la frase 'cada uno'
No tienen sentido.
"Yalal ad-Din Muhammad Rumi"
hay un lugar.
Nos vemos ahí.
Cuando el alma yace sobre la yerba.
El mundo esta demasiado lleno para hablar de él.
Las ideas, el lenguaje, incluso la frase 'cada uno'
No tienen sentido.
"Yalal ad-Din Muhammad Rumi"
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El mar llega a todas partes, y todo va erosionado...
ResponderEliminarEse olvido quedó anclado ¿para siempre?
Preciosas palabras Marinel que me llevan a reflexionar sobre el olvido.
Feliz comienzo ya de semana, un beso
Milena, en el fondo, el olvido es voluntario y erosiona en la medida que quieras no olvidarlo...
EliminarGracias.
Feliz semana.
Besos.
PARECE QUE TODO ESTÁ PERDIDO.
ResponderEliminarUN ABRAZO
Reltih, en el fondo.
EliminarUn abrazo.
Marinel... ¡¡ preciosas letras como tu portada !!!
ResponderEliminarun beso
Doris, gracias, la portada es lo mejor!
Eliminar:)
Un beso.
El fondo del mar...
ResponderEliminarUn buen lugar donde anclar al olvido. Bien profundo
Muy hermoso
Besos
Trini, no hay lugar mejor para anclarlo.
EliminarGracias.
Besos.
Hola Marinel, el olvido se quedo anclado en el abismo del océano, ojala amiga, se quedase por siempre allí y ese olvido se olvidase mismamente de nosotros:)
ResponderEliminarBesos.
Piruja, ay... si ya nos tienen olvidados!
Eliminar;)
Besos.
Al paso que vamos y, según se nos informa, el fondo del mar es un auténtico basurero.
ResponderEliminarSaludos
Emilio, basura,pues, por todos lados...
EliminarSaludos.
Me suena a...todo se perdió en el fondo del mar.
ResponderEliminarFeliz lunes Marinel.
Carmen, pues sí...como aquellas famosas llaves...
EliminarFeliz lunes.
Hoy tus letras me hacen reflexionar, Marinel...Somos memoria y olvido...Luchamos cada día por seguir siendo y sintiendo, luchamos por zarpar y no naufragar...La vida es generosa y siempre nos da nuevas oportunidades,sigamos confiando en ella y dando lo mejor por encima de todo y de todos.
ResponderEliminarMi gratitud y mi abrazo inmenso por tu grandeza interior y tu cercanía.
M.Jesús
Mª Jesús, así somos, memoria y olvido. A veces la memoria olvida lo que somos y el olvido, olvida recordárselo...
EliminarNo queda otra que confiar.
Mi gratitud a ti, por supuesto.
Un abrazo enorme.
Mi querida Marinel en el fondo del mar quedan ancladas muchas cosas(recuerdos, penas, sueños y deseos por cumplir) sin embargo un dia seguro que logramos zarpar y llegar a un lugar bello y mucho mejor.
ResponderEliminarIlesin, tenemos un fondo muy fondo, así que caben infinidad de cosas, entre ellas, la esperanza que es lo último que naufraga.
EliminarAnclar el olvido en lo más profundo para que no emerga jamás.
ResponderEliminarBesos
José Manuel, así ha de ser en muchas ocasiones.
EliminarBesos.
En los ojos del océano, en ese mar intenso, no hay distancia ni tiempo, solo recuerdos, reflexiones.
ResponderEliminarBesos guapa.
Lore, sí...en este fondo oceánico nuestro reside todo eso venido de la experiencia de vivir.
EliminarBesos muchos.
De ahí anclada en el tiempo
ResponderEliminarNoel, chirriante y oxidada.
EliminarNostalgia, decepción...y, aun así, un deje de amor por lo que hubiera podido navegar.
ResponderEliminarMuy bello.
Un abrazo.
Fanny, sí...las cosas de la vida que nos remueven, en definitiva.
EliminarGracias.
Un abrazo.
Hábitat de mascarones y despojos de barcos... como muchos de nuestros sueños ahogados ante una realidad inamovible muchas veces. Un placer Marinel, estuve fuera. pero he vuelto. Bello tema.
ResponderEliminarLeticia, hábitat de todo tipo de despojos como nuestro mar interno en donde todo recala y en muchos casos, ancla definitivamente...
EliminarGracias.
Besos y bienvenida.
Otro corazón muerto.
ResponderEliminarDescanse en paz.
Besos.
Toro, más bien de latidos amortiguados por el zumbido del olvido.
EliminarEn cierto modo, es descansar en paz también.
Besos.
el olvido, que villano, a veces pasa cuando no queremos y a veces no pasa y lo buscamos
ResponderEliminarsaludos
Omar, es como que juega al escondite con nosotros,sí...siempre imprevisible.
EliminarSaludos.
El olvido donde mejor está es definitivamente en el fondo del mar.
ResponderEliminarBesazo
Dolega, sin duda así es.
EliminarBesazo.
Así de rico es el mar donde se anclan tantas cosas. Es por ello que tanto se escribe de él? Es por ello su inmensidad? Es por ello por lo que lo miramos cuando termina la tarde y el ocaso nos trae su brisa?
ResponderEliminarGenial Marinel.
Besos
Alguien más, el mar en su riqueza es fuente inagotable de inspiración, en éste caso, para introducir ese otro mar que llevamos dentro.
EliminarGracias.
Besos.
El olvido siempre se pierde las dosa abisales de nuestra mente de antiquisimos seres marinos....
ResponderEliminarUn beso!
Moderato, justo en esas fosas abisales es donde ancla el olvido.
EliminarUn beso.
Restos oxidados de tiempos seguramente brillantes. Nada como el mar para hablarnos del olvido y con él, de lo efímero de la existencia.
ResponderEliminarAbrazos.
Jerónimo,o no...no todo tiempo brilla ni queda vacío en el olvido, pero sí que todo tiempo pasa a ocupar su lugar en nuestro efímero mar.
EliminarAbrazos.
Tal vez alguien lo encuentre... Algún poeta que llegue al fondo en busca de palabras perdidas... Nada se pierde en la inmensidad... dicen. Yo así lo
ResponderEliminarcreo. Y ese ancla o arpón, es muy significativo, habla de haber vivido. No. No puede perderse ni tampoco quedar en el olvido. Me ha encantado...
Julie, encontrar el olvido de manos de la poesía...que bonito.
EliminarSe nota que eres poeta.
:)
Todo lo vivido, deja huella hasta en el olvido. Lo anhelado por vivir, también.
Gracias.
Maravilloso, de verdad, Marinel, un abrazo.
ResponderEliminarMuy bueno.
Enhorabuena, me encantó. Gracias.
Amapola, me alegra que te guste.
EliminarMuchas gracias.
Un beso.
Es un buen lugar, para ahogar el olvido.
ResponderEliminarBesos
Inma, inmejorable.
EliminarBesos.
Pese a esas anclas olvidadas, aún le quedan tantos peces a ese Mar...
ResponderEliminarBesos, princesa.
Eva, el mar es inagotable, dicen...
EliminarBesos, hermosa.
El mar no extermina, conserva. Y más los sentimientos...
ResponderEliminarBesos.
Miguel, pero oxida lo ajeno...
EliminarBesos.
En el fondo del mar, todos los naufragios, todos los errores de cálculo y los proyectos frustrados, finalmente, todas las lágrimas de los equívocos. Muy sugerente, Marinel.
ResponderEliminarBesos.
Francisco, ahí, a ese mar interno que nos gobierna, va todo. Estamos hechos de lágrimas...
EliminarBesos.
Anclarse y ahogarse en el mar del olvido es jodido, aunque a veces esto ayuda para desahogarse y comenzar otras vivencias con más fuerza.
ResponderEliminarBesos Marinel.
Rafa, jodido del todo, pero también tienes razón en lo demás.
Eliminar:)
Besos.
Maravilloso Marinel. Eso de naufragar antes de zarpar....tremendo...cuantas cosas se intuyen en lo profundo del oceano de este poema. Gracias y un abrazo
ResponderEliminarVíctor, son esas cosas que a veces suceden...se ahogan aún sin lanzarse al mar...
EliminarGracias a ti.
Un abrazo.
Un mar que nos enseña
ResponderEliminarherrumbres del pasado.
Me ha encantado.
Un beso
Marisa, así es el olvido, para bien y para mal; también
EliminarGracias.
Un beso.
Conozco esa profundidad.
ResponderEliminarAzul, como tus letras.
Abrazos grandes.
Sil, lo sé, sé de tus movimientos acuáticos por salir a la superficie...
EliminarAbrazos muchos.
Mi recuerdo quedó anclado en el último lugar del mundo.
ResponderEliminarUn abrazo!
Catita, lejos quedó tu olvido.
EliminarUn abrazo.